La resistencia bacteriana, una de las principales amenazas para la salud global

La resistencia bacteriana, una de las principales amenazas para la salud global

En este artículo explicaremos la problemática de la resistencia bacteriana, examinando los factores que contribuyen a su expansión, los distintos tipos de resistencia y estrategias para prevenir su propagación. 

Además, abordamos las perspectivas de distintos expertos con el objetivo de obtener una comprensión más completa de esta situación.

En el siglo XXI, la resistencia bacteriana se posiciona como una de las principales amenazas para la salud global, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). La institución señala que este fenómeno «está aumentando en todo el mundo a niveles peligrosos […] están apareciendo y propagándose en todo el planeta nuevos mecanismos de resistencia que ponen en peligro nuestra capacidad para tratar las enfermedades infecciosas comunes».

¿Qué es la resistencia bacteriana?

La resistencia bacteriana, también conocida como resistencia a los antibióticos, es la capacidad de las bacterias para enfrentarse a los efectos de los antibióticos diseñados para eliminarlas. 

A lo largo de las décadas, el uso excesivo e inadecuado de estos medicamentos ha acelerado el desarrollo de cepas bacterianas resistentes. Este fenómeno pone en peligro la eficacia de tratamientos médicos básicos y aumenta la tasa de morbilidad y mortalidad en todo el mundo, lo que lo convierte en una preocupación global. 

Tipos de resistencia bacteriana 

Existen diversos tipos de resistencia bacteriana: 

  • La resistencia natural se refiere a la capacidad innata de ciertas bacterias para resistir ciertos antibióticos.
  • La resistencia adquirida se desarrolla a lo largo del tiempo debido a la exposición constante a los antibióticos. 
  • La resistencia transmitida implica la transferencia de material genético resistente de una bacteria a otra, multiplicando la propagación de cepas resistentes.La resistencia transmitida destaca la capacidad de adaptación de las bacterias.

Causas de la resistencia bacteriana

La resistencia bacteriana es el producto de una interacción compleja de diversos factores, divididos principalmente en dos ejes, el humano y el animal: 

Comportamientos humanos que aumentan la resistencia bacteriana

  • Uso indiscriminado de antibióticos: la administración excesiva de antibióticos en la medicina humana, muchas veces sin una necesidad clara o prescripción adecuada, es un factor significativo de la resistencia bacteriana.
  • Incumplimiento de indicaciones farmacéuticas: la no adherencia a las prescripciones médicas, que incluye interrumpir tratamientos antes de su finalización, contribuye a la emergencia y propagación de cepas resistentes.
  • Automedicación: la práctica común de automedicarse sin supervisión médica aumenta fomenta el desarrollo de resistencia de las bacterias. 

Es por esto que los pacientes deben consultar siempre con su farmacéutico antes de iniciar un tratamiento. 

Problemas derivados de los animales en la resistencia bacteriana 

  • Uso de antibióticos en veterinaria: en la cría de animales, el uso excesivo de antibióticos para prevenir enfermedades contribuye a la creación de un entorno propicio para cepas bacterianas resistentes.
  • Transferencia de resistencia entre animales y humanos: la proximidad en la relación entre la salud animal y humana facilita la transferencia de resistencia bacteriana, aumentando el riesgo para ambas poblaciones.

Cómo evitar la resistencia bacteriana

El principal mecanismo para evitar el problema de la resistencia bacteriana es la educación y la concienciación, una labor que puede realizarse desde las oficinas de farmacia. La comprensión pública de la importancia del uso adecuado de antibióticos, así como de las prácticas de higiene y prevención de infecciones, puede ser, por tanto, fundamental. 

Campañas educativas a nivel global pueden desempeñar un papel crucial para cambiar las percepciones y comportamientos en torno al uso de antibióticos, creando una sociedad más informada y comprometida en la prevención de la resistencia bacteriana.

No obstante, las estrategias de prevención también deben incluir el desarrollo de nuevos antibióticos y terapias alternativas.

¿Qué dicen los expertos?

Los expertos en salud pública han mostrado durante muchos años su preocupación por la resistencia bacteriana. Estos subrayan la necesidad de abordar el uso excesivo de antibióticos en todas las áreas, desde la medicina hasta la ganadería.

Además, como se ha comentado anteriormente, la importancia de la investigación y el desarrollo de nuevas terapias para combatir cepas resistentes, también es un asunto relevante. 

Algunos profesionales proponen enfoques innovadores, como terapias basadas en fagos y estrategias de modulación del microbioma, como posibles soluciones a largo plazo.

  • Terapia de fagos: Los fagos son virus que infectan bacterias específicas, y la terapia de fagos utiliza estos virus para atacar y destruir bacterias resistentes a los antibióticos. 

A diferencia de los antibióticos convencionales, los fagos son altamente específicos, lo que significa que pueden dirigirse selectivamente a cepas bacterianas resistentes sin afectar las bacterias beneficiosas.

  • Modulación del microbioma: El microbioma humano se refiere a los diversos microorganismos que habitan en nuestro cuerpo, incluyendo bacterias, virus, hongos y otros. Este ecosistema juega un papel fundamental en la salud, incluida la protección contra patógenos invasores.

Existen varias estrategias para la modulación del microbioma, que van desde el uso de probióticos y prebióticos hasta enfoques más avanzados, como trasplantes fecales.

El impacto económico de la resistencia bacteriana

La resistencia bacteriana no solo afecta la salud pública, sino que también tiene un impacto económico significativo. El aumento de las infecciones resistentes a los antibióticos conduce a hospitalizaciones prolongadas, tratamientos más costosos y una mayor carga financiera en los sistemas sanitarios.

Desafíos en el desarrollo de nuevos antibióticos

El desarrollo de estos medicamentos se ha estancado en comparación con décadas anteriores. 

Factores como los altos costos de investigación y desarrollo, la incertidumbre en la rentabilidad y la complejidad de vencer las resistencias bacterianas emergentes han desalentado a las compañías farmacéuticas. 

Abordar estos desafíos se ha vuelto crucial para garantizar que tengamos las herramientas necesarias para combatir las infecciones en el futuro.

La importancia de la cooperación internacional

La resistencia bacteriana no reconoce fronteras, y su gestión efectiva requiere una cooperación internacional sólida. Compartir datos, mejores prácticas y coordinar esfuerzos a nivel mundial son elementos esenciales para abordar este tipo de crisis sanitarias como ocurrió con lo fue la COVID-19. 

Organismos internacionales, gobiernos y sectores privados deben unir fuerzas para desarrollar estrategias globales que aborden de manera integral la resistencia bacteriana desde diversas perspectivas.

En conclusión, para revertir esta tendencia, es esencial un esfuerzo coordinado a nivel mundial. La concienciación pública, la investigación constante y la implementación de medidas preventivas son pasos cruciales en la lucha contra esta crisis que afecta a todos. 

La resistencia bacteriana es un problema complejo, pero con la acción adecuada, se puede enfrentar esta amenaza y preservar la eficacia de los antibióticos para las generaciones futuras.